jueves, 22 de marzo de 2012

Historia de las brujas (Parte II)



Desde que existe el mundo no ha habido ninguna época en la que el hombre no haya hecho algún tipo de practica ocultista . La gran curiosidad del ser humano por los conocimientos secretos empezó cuando se dio cuenta de que las fuerzas de la naturaleza eran más poderosas que él mismo, y quiso dominarlas.

 Hasta el s. XIII los brujos, adivinos o curanderos solamente eran castigados con la muerte si producían algún daño concreto e irreparable. Estas ceremonias paganas que se llevaban realizando desde siempre,era algo que la Iglesia no podía erradicar, ya que pertenecía a la cultura originaria de cada pueblo. El cristianismo no se oponía a la creencia sobre hechos extraños en la naturaleza ya que la Iglesia creía en los milagros de los santos, pero sí se oponía cuando los "milagros" provenían del demonio y no podía permitir que la gente creyera que todas esas personas que tenían ciertos poderes eran seres "divinos" así que debían a toda costa erradicar estas creencias. En este punto nació la brujería que, hasta este momento, había sido hechicería.

Mirando hacia atrás en la Historia podemos encontrar una gran diversidad de practicas ocultistas.

El mago más antiguo que se conoce se remonta a 30.000 años y lo podemos ver en las cuevas de Trois Frères (Francia), estuvo oculto durante millones de años hasta ser descubierto en el s.XIX. Esta pintura rupestre muestra a un hombre bailando con una máscara de ciervo. No sabemos si este hombre era un encantador de animales, cuya danza los hipnotizaba y atraía a la tribu para darles caza o, quizá, la forma en que veía el artista a un espíritu de la naturaleza, similar al dios celta Cernunnos. Pero lo que si podemos saber a ciencia cierta es que nuestros antepasados creían en una extraña fuerza oculta que era capaz de dominar los poderes de la naturaleza.

La dependencia del hombre de las fuerzas de la naturaleza aumentó cuando aprendió a cultivar la tierra. Ahí surgió un culto hacia los poderes de la fertilidad en el mundo de las plantas, y a su vez, por un interés hacia la astronomía. En estas primitivas comunidades se empezó a hacer una división entre los líderes religiosos. Mientras que unos se convirtieron en observadores de las estrellas, otros se transformaban en curanderos y profetas, cuya misión era expulsar a los demonios que causaban enfermedades. Las ceremonias que se desarrollaban para curar las enfermedades fueron completadas con medicamentos hechos de raíces y hierbas. También formaba parte de su tarea mantenerse en contacto con los espíritus de la naturaleza para asegurar la fertilidad de la tierra. Estos fueron los antecesores de los doctores rurales y los especialistas agrícolas.

Continuaremos en este camino de los desconocido, espero que te haya gustado y que mi blog sea digno de un comentario tuyo... 

No hay comentarios:

Publicar un comentario